Este martes retoman el debate sobre el destino de la empresa estatal. El Gobierno aspira sancionar el proyecto antes del 30 de noviembre, cuando concluyen las sesiones ordinarias. Existen tres propuestas, impulsadas por el oficialismo, el PRO y la Unión Cívica Radical.
La Cámara de Diputados reanuda este martes el debate sobre la privatización de Aerolíneas Argentinas, en medio de un fuerte conflicto con los gremios aeronáuticos que el miércoles concretarán paro junto a otros sindicatos del transporte.
La discusión se efectuará desde las 11 en un plenario de las comisiones de Transporte y de Presupuesto y Hacienda, que presiden la radical mendocina Pamela Verasay y el libertario José Luis Espert, respectivamente.
El oficialismo aspira sancionar esta iniciativa antes de que el 30 de noviembre concluyan las sesiones ordinarias, pero para eso deberá acordar primero el texto definitivo del dictamen con los bloques dialoguistas.
En las comisiones existen tres iniciativas, de las cuales una corresponde al Poder Ejecutivo, otra al legislador del PRO Hernán Lombardi y una tercera corresponde a Juan Manuel López de la Coalición Cívica.
De todos modos, no se espera que mañana salga el despacho ya que se trata de una reunión informativa donde deben exponer especialistas y sindicalistas, ya que hasta ahora solo expusieron los funcionarios del Gobierno nacional.
Además, aun La Libertad Avanza (LLA) no terminó de consensuar el proyecto con todas las fuerzas dialoguistas, debido a que la Coalición Cívica y Encuentro Federal quieren que se tome como base el proyecto de López, que pone más condiciones para que el Gobierno avance con la venta de la empresa estatal.
En cambio, Unión por la Patria (UxP) y la izquierda rechazan de plano la venta de la empresa estatal.
El debate de la privatización se produce en medio de un profundo conflicto entre las autoridades y los gremios del sector aeronáutico que viene realizando medidas de protesta en reclamo por un acuerdo salarial.
Desde que asumió, el Gobierno avanzó con diferentes medios para desregular el mercado del servicio aeronáutico con distintos decretos para abrir a la competencia. En septiembre, el Gobierno dio otro paso cuando declaró al transporte como servicio esencial y en octubre publicó en el Boletín Oficial el decreto que declaraba a Aerolíneas Argentinas “sujeta a privatización”.