LA TRASTIENDA VILLA MARƍA

Vencido el plazo para la presentación de listas de candidatos a la intendencia, el Concejo Deliberante y el Tribunal de Cuentas, el oficialismo peronista cerró filas y formalizó el lanzamiento de Eduardo Accastello, con quien buscarÔ la continuidad en el poder que ostenta desde 1999. Enfrente, habrÔ otros nuevos candidatos. Inicialmente, se proyecta un casi mano a mano con el postulante de Juntos por el Cambio, Darío Capitani. La elección serÔ el próximo 1 de octubre.

En la ciudad cabecera del Departamento San Martín, los electores votan en el establecimiento mÔs cercano a su domicilio. Para los comicios municipales del domingo 1 de octubre, el mapa de sectores ya estÔ listo: la ciudad se fragmentó en 26 distritos, habrÔ 28 escuelas y un total de 184 mesas para 71.970 electores.

Un aspecto por demƔs relevante: rige el criterio de proximidad domiciliaria para dichos comicios. Por eso, desde la Junta Electoral recomiendan a las y los ciudadanos controlar previamente el establecimiento que le corresponde a su barrio.

Larga y trabajosa unidad

Corría a velocidad desmedida el reloj del coqueto salón del hotel. Las horas parecían minutos en el cónclave de la cúpula justicialista reunida en las afueras de la ciudad. Sólo después de unas cinco horas de deliberaciones sostenidas a puro café y botellitas con agua, llegó el momento de la distensión, la liberación de sonrisas -algunas forzadas, por cierto- y la disposición para las primeras imÔgenes. El PJ de Villa María, acababa de sellar finalmente la unidad de todos los sectores erigiendo a Eduardo Accastello como candidato a la intendencia.

Producidas las presentaciones de forma de la lista respectiva en el tribunal electoral, la buena nueva corrió con velocidad 5G por los rincones del mundillo político local, provocando los impactos de su confirmación.

Si bien, se conocía de la postulación del hasta ahora ministro de Industria de la provincia por sus primeras recorridas en sectores de la ciudad, no había indicios de la unidad del peronismo, en virtud de los durísimos contrapuntos forjados y mantenidos con el actual intendente Martín Gill, desde hace varios años a la fecha.

En el retiro obligado del viernes último que forjó el humo blanco de la unidad estaban los dos pesos pesados, mÔs la incansable Nora Bedano, el presidente del partido, también Marcos Bovo, actual secretario de Comunicaciones de la provincia y un puñado de dirigentes con ganado predicamento. De ahora en mÔs, avanzarÔn bajo la escudería de Hacemos Unidos, por Villa María, claro.

Relajación en Córdoba

El alumbramiento de la candidatura de Accastello, ā€œcon todos adentroā€ frunció las cejas de la dirigencia opositora, que alimentaba alguna chance de quiebre en el oficialismo, y provocó un esperado momento de relajación en la cĆŗpula del justicialismo provincial. SĆ­, hubo tranquilidad en El Panal, entre Juan Schiaretti y los suyos, pero mĆ”s aĆŗn, se festejó como un gol de Messi, en el Palacio 6 de Julio de la Municipalidad de Córdoba, donde aĆŗn habita, el electo gobernador MartĆ­n Llaryora, quien siguió el minuto a minuto de ā€œla roscaā€ de sus compaƱeros de Villa MarĆ­a.

Es entendible, el próximo gobernador no sólo configura su tablero de gestión para diciembre en adelante sino, ademÔs puntea al detalle lo que ocurre en los mÔs de 400 pueblos y ciudades de la provincia, y Villa María ocupa un lugar de relevancia, tal como lo serÔ Río Cuarto el año próximo, cuando fije llamado a elecciones.

El reparto de Las porciones

En relación con el reparto de lugares, Accastello, serÔ acompañado por Juan Pablo Inglese, encabezando la boleta de concejales, a quién por su parte, seguirÔn Yaslil Osses, también del accastellismo, y referentes de Martín Gill, como los casos de Celeste Curetti y José Cativelli, entre otros. Se destaca en el acuerdo la postulación de Rafael Sachetto (también del actual intendente), para el relevante lugar de Auditor General.

Un comunicado oficial intentó poner las cosas en cierto orden puertas afuera. AllĆ­ se confirmó la vuelta del tres veces intendente (1999-2003 y 2007-2015), y se destacó que ā€œponemos a consideración de la población nuestro compromiso con una Villa MarĆ­a Ciudad Segura, Ciudad Productiva e Innovadora y Ciudad Humanaā€.

En principio, el acuerdo plasmado dejó tranquilidad en uno y otro sector. Para dar crédito, alcanza un mensaje en redes, mÔs que mil declaraciones. En las últimas horas, un tweet de Gill en el que aparece en una imagen posando con el mismo Accastello, mÔs un texto de apoyo, animan al justicialismo villamariense a encolumnarse en la figura del aún ministro provincial y prepararse para la batalla electoral.

Al fin y al cabo, Accastello vio la oportunidad, arrinconó en parte al actual intendente con su postulación anticipada, y logró la unidad del PJ. Por su parte, Gill, atravesando varios contratiempos en su último tramo de gestión, se queda con una porción de representatividad importante en el poder municipal, al que debe adicionarse otro espacio no menor: el triunfo categórico que logró en la Universidad Nacional de Villa María, con la reelección de un hombre de su espacio, Luis Negretti, quien se alzó semanas atrÔs con el 83% de los votos ponderados.

Capitani, para torcer la historia

En la vereda de la oposición, Juntos por el Cambio tiene hace bastante tiempo a su candidato a intendente lanzado y caminando la ciudad: el legislador provincial Darío Capitani, quién ante la posibilidad cierta, y luego confirmada de la unidad del oficialismo, procuró contrarrestar dicho efecto con el armado de un fugaz encuentro, en la localidad bonaerense de Pilar, para lograr una foto de respaldo con la postulante presidencial Patricia Bullrich.

La coalición de Juntos, aparece como la amenaza mÔs seria de disputarle la elección a Accastello y los suyos. Si bien, tiene algunos desprendimientos de dirigentes radicales, algunos juecistas y otros de la Coalición Cívica, que se corporizaron en otras listas opositoras, se asienta sobre un armado bastante consistente, que tiene como antecedente el triunfo en la misma ciudad, en la elección provincial del 25 de junio último, y un resultado por encima del oficialismo en las Paso de agosto.

De todas maneras, todos saben muy bien que la del 1 de octubre próximo serÔ una contienda absolutamente diferente. Con un oficialismo potente, con mucho por mostrar en términos de gestión y un candidato de largo recorrido.

Para sacudir el tablero, Capitani ya le dedicó unos mensajes por redes a la postulación de Accastello, al cuestionarle dichos sobre seguridad ciudadana y programas para personas con discapacidad. No obtuvo respuesta, pues aseguran desde el oficialismo, que de momento no hace falta fabricar un escenario pugilístico con nadie.

Postulaciones para todos los gustos

A continuación, el detalle de las listas y candidatos presentados que también formarÔn parte de la elección y tendrÔn mucho para mostrar y capitalizar:

Aparece como dato saliente la primera participación con candidatura y nómina propia, el Partido Libertario, que encabeza en el orden nacional Javier Milei. En el Ômbito local, la candidata es Julieta Ceballos.

Cambia Villa María, postula al radical Braulio Zanotti -ex intendente de la vecina, Villa Nueva- y es acompañado por Guillermo Lorenzatti de la Coalición Cívica.

Desde el Frente Federal, se confirmó a Néstor Mójica, también de origen radical, seguidor de la electa vicegobernadora, Miriam Prunotto, y perteneciente al espacio de los Radicales Auténticos.

Carlos Gilibertti, otro dirigente vinculado con la UCR, y que vuelve a ser candidato, en este caso por el Movimiento de Compromiso y Participación.

Otro sector que confirmó lista es Uniendo Villa María, que presenta la candidatura de Manuel Sosa, y que lleva como candidato a auditor al destacado neurólogo Sergio Vesco.

Gerardo Mauricio Centani, que se presenta por PolĆ­tica Abierta para la Integridad Social, aquel Partido PAIS, que siempre tuvo en la ciudad y la provincia la impronta del fallecido exlegislador nacional y provincial Enrique Sella.

La lista vecinalista de Encuentro DemocrÔtico para la Libertad tendrÔ como candidato a Alejandro López, uno de los primeros que confirmó su candidatura a intendente.

El Frente de Izquierda Unidad lleva a la enfermera Nadia Brossard.