Este viernes se concretó la 288ª colación de grado y posgrado de la UNRC en donde más de un centenar de graduados recibieron sus diplomas que le permitirán desempeñarse como profesionales.
En un acto realizado por la mañana y otro por la tarde, la Universidad Nacional de Río Cuarto entregó 125 diplomas a graduados: 21de Agronomía y Veterinaria, 7 de Ciencias Económicas, 20 de Ciencias Exactas, Físico-Químicas y Naturales, 68 de Ciencias Humanas y 9 de Ingeniería.
En la ceremonia matinal hicieron uso de la palabra el decano de Ciencias Económicas, Guillermo Mana, y el médico veterinario Lucas Ferrero Faiad por los graduados, mientras que en la vespertina fue el turno de la vicedecana de Ciencias Exactas, Marcela Daniele, y de la técnica de laboratorio y microbióloga, Lucía Picco.
En su alocución, el profesor Mana dijo que una colación “es un momento de orgullo, de reconocimiento y de disfrute por el logro alcanzado”. Citó a Steven Spielberg, quien sostiene que “durante los primeros 25 años de nuestras vidas nos entrenan para escuchar a voces que no son las nuestras. Yo creo que tiene razón”, expresó Mana y al dirigirse a los nuevos profesionales añadió: “Creo que ahora sí sus voces comenzarán a hacerse sentir con una fuerza distinta, diferente. Con una potencia que hasta los puede sorprender”.
Sostuvo que “la vida es una improvisación permanente y la verdad es que ninguno de nosotros tenemos la menor idea de lo que va a venir. Tranquilos. No les pasa solamente a ustedes en este momento particular. Siempre domina la incertidumbre y la noticia es que siempre lo hará. Por lo tanto, debemos aprender a manejarnos y tomar decisiones con menos información de la que nos gustaría ya que la vida no es un laboratorio controlado. Se parece mucho más a un espacio caótico”.
Entonces, continuó el decano, “es lógico que el futuro nos genere miedo y nos presente dudas. Pero hay que tener claro que el futuro también representa, oportunidades, desafíos, retos, competencia, etc. En definitiva, la sal de la vida”.
Educación, compromiso y transformación
La vicedecana de Ciencias Exactas comenzó resaltando que la creación de la UNRC “marcó un hito y constituyó uno de los hechos más importantes de la historia de la ciudad de Río Cuarto”, que “fomentó y fortaleció el desarrollo social, cultural, económico y productivo tanto de la ciudad como de toda la región”.
Marcela Daniele subrayó que “la educación brinda conocimiento, el cual es liberador y permite tomar mejores decisiones”. En este sentido agregó: “La educación forma personas libres, responsables y comprometidas con la sociedad. La educación genera las condiciones para el desarrollo de una ciudadanía crítica, honesta y solidaria, que busca pertenecer a una sociedad más justa, equitativa, dinámica y diversa. La educación impulsa el desarrollo sostenible de una nación. La educación transforma, permite contar con herramientas sólidas para debatir y buscar soluciones a los problemas de inseguridad, pobreza, violencia, violencia de género”.
Postuló que “defender la educación pública y gratuita es querer un mundo con igualdad de oportunidades, más justo y equitativo, es querer un mundo mejor para todos, con verdadera inclusión social. Defender la educación pública y gratuita es garantizarle a nuestros hijos, a nuestros nietos, el derecho de a la educación, en todos sus niveles, primario, secundario y superior”.
Finalmente, dijo a los noveles graduados que “su aporte es fundamental y actúa como un pilar de ésta transformación social. Su responsabilidad y compromiso con la sociedad los interpela como profesionales íntegros que luchen en pos de un mundo mejor y con igualdad de oportunidades para todos; guiados por la ética, responsabilidad, honestidad, solidaridad, el respeto a las personas y a la diversidad de sus ideas y pensamientos”.
“Esta Universidad es su casa, y rogamos que así la sientan; que la hayan disfrutado mucho, que se lleven los mejores e inolvidables recuerdos de este camino transitado y que regresen. Los esperamos”, concluyó.