Por Gustavo Román. Director Propietario La Ribera Multimedio
Y los riocuartenses elegimos nuestro futuro, designando autoridades en todos los niveles del poder municipal. Un proceso que termina generando atractivo en todos los escenarios, ya que la fecha de los comicios impone un atractivo extra y con muchas lecturas políticas. Locales, provinciales y nacionales, pero esos escenarios para nada confunden a una ciudadanía que tiene claro que vota con sentido de pertenencia local.
Las opciones abundan, y existen propuestas de las mas diversas. Con un oficialismo que apuesta todo por la continuidad y con el apoyo de una estructura provincial, que considera estratégica esta elección, la candidatura de Guillermo De Rivas se consolida y encuentra muy buena aceptación en esta sociedad. El dirigente conoce la gestión, forma parte del equipo de gobierno y además tiene sintonía fina con el poder provincial y sus principales actores.
Esta claro que el escenario es atípico para el gobierno. Tiene mucho para reconsiderar. Esta claro que no supo o no pudo contener a propios y extraños, que la conducción política presenta fisuras evitables y propias de visiones equivocadas del propio Juan Manuel Llamosas. El intendente se equivocó con su lectura y estilo de construcción. Está en su figura la síntesis de esos yerros, que ahora ponen en riesgo la continuidad del oficialismo en el poder, pero eso es tema para otros análisis en el tiempo.
Por el lado de la oposición, esta claro que la llegada del acuerdo interno en el radicalismo, abonó con creces sus propias oportunidades electorales. Después de la interna que dejó abiertas muchas heridas, quedo claro que en ese escenario primó la cordura y la sensatez, y entonces el armado político fue consolidándose. Aun cuando las especulaciones fueron de las más diversas, sus principales actores mostraron su mejor versión y concluyeron en un acuerdo imprescindible para llegar al 23 de junio con serias chances.
Gonzalo Parodi es un dirigente que sabe caminar el territorio, y transita las calles de la ciudad sin dudas ni desconocimiento. Sabe qué hace y porqué. Los vecinos lo conocen y lo respetan. Es el más peronista de los radicales, aseguran en su entorno. Ese capital político propio lo complementa una alianza que se consolida con Gabriel Abrile, que suma adherentes en diferentes ámbitos donde su figura es fuerte.
Estas dos expresiones de la política, las tradicionales y más conocidas, aparecen en todos los sondeos con una polarización de los votos. La discusión terminó centrándose es esas dos expresiones, según todos los indicadores. Aun cuando las encuestas muestran un escenario, y la evolución de los procesos es muy dinámica, todo indica que entre estas dos fuerzas se definirá la distribución del poder por los próximos cuatro años.
Detrás se ubica un lote de candidatos con expresiones que van en todos los sentidos, algunas de las cuales son muy atractivas, con proyectos y figuras que se suman a la política con miradas y propuestas que pueden aportarle mucho al desarrollo de una ciudad que necesita sacudirse de un formato anticuado y poco disruptivo. Es muy bueno que se sumen miradas que aporten aire fresco a la construcción de nuevos formatos, espacios de pensamiento y debates que nos abran nuevos horizontes.
Y están los otros que no suman nada, que son mezquinos, personalistas, berretas y que solo se justifican en el concepto de aspectos negativos de la política. Tan negativos que fenecen por falta de sustento en el mismo proceso en el que surgen. Nada que se construya desde un espíritu negativo logra otro objetivo mas que el de cosechar lo que siembra a su paso. Hay candidatos que tienen como eje central de su armado la soberbia, el egocentrismo y una nula pluralidad. No suman, encolumnan. Esos dirigentes tendrán el 23 de junio su propio espejo en las urnas.
En ese contexto, los riocuartenses podrán elegir entre 10 opciones electorales. Hay para todos los gustos y con un abanico de propuestas. Hay que defender la democracia, fortalecerla y participar. Su voto es un mensaje contundente. Aproveche la oportunidad para utilizar la herramienta más poderosa que nos brinda este escenario. Y celebremos la voluntad del pueblo.