El maíz y el girasol ganan protagonismo en la campaña gruesa 2025/26, mientras retroceden soja, maní y sorgo
La campaña agrícola 2025/26 avanza en Córdoba con un escenario de precios firmes, buenas reservas de humedad y una recuperación del equilibrio en la rotación de cultivos. Las condiciones climáticas favorables y la rentabilidad esperada de los principales granos están impulsando una reconfiguración del mapa agrícola provincial, marcada por el avance del maíz y el girasol, y la retracción de la soja, el maní y el sorgo.
Según la segunda estimación de superficies de cultivos estivales, se mantiene la tendencia anticipada el mes pasado: el maíz recupera el terreno perdido en el ciclo anterior, mientras que el girasol consolida el crecimiento logrado en 2024. En contraste, disminuirían las áreas destinadas a soja, maní y sorgo.
La siembra de girasol comenzó a principios de septiembre, aunque aún no se reportan datos de avance, mientras que el maíz temprano inició sus labores a mediados del mismo mes, principalmente en el sur y sureste de la provincia.
Rentabilidad y clima, los factores decisivos
El precio de los granos y la rentabilidad esperada de cada cultivo fueron los principales factores que orientaron las decisiones de siembra. En segundo lugar, los productores tomaron en cuenta el pronóstico climático, que anticipa un ciclo con buena disponibilidad de agua en el perfil del suelo.
El incremento en la superficie de maíz se traduce en una reducción de la soja, lo que contribuye a restablecer la rotación agrícola tradicional, afectada durante la campaña pasada. Parte de los lotes que dejan de destinarse a soja pasarán a girasol, cultivo que viene ganando terreno en zonas donde antes no tenía presencia significativa.
En cuanto al maní, la caída en la superficie sembrada responde principalmente a factores económicos: precios bajos del grano, altos costos de alquiler y exceso de stock. Frente a este panorama, muchos productores optaron por esperar un repunte de los valores internacionales para retomar la inversión en el próximo ciclo.
Por su parte, el sorgo vuelve a las áreas marginales donde tradicionalmente se cultiva, luego de haber ganado protagonismo temporal en la campaña anterior, cuando el maíz redujo su participación.
Condiciones climáticas favorables
Las lluvias invernales fueron ampliamente superiores a los promedios históricos en toda la provincia, especialmente en los departamentos del sudeste, lo que generó una importante recarga de humedad en los suelos. Esta situación alentó el inicio anticipado de la siembra de maíz temprano.
Además, la baja presión de la chicharrita, que complicó la campaña pasada, contribuyó a un mayor optimismo entre los productores.
En el caso de la soja, se prevé una reducción de la superficie temprana y un aumento de las siembras tardías o de segunda, debido a que la mayor implantación de trigo en invierno retrasará la liberación de lotes.
Con precios sostenidos, humedad disponible y un calendario de siembra que avanza sin contratiempos, la provincia de Córdoba se encamina a una campaña que promete recuperar la estabilidad productiva y reafirmar su rol como una de las principales regiones agrícolas del país.
Fuente: TodoAgro