Se trata del trayecto que une Tala Cañada–Taninga, de 13 kilómetros sobre la Ruta Provincial 28, que consolida el inicio de un nuevo corredor de montaña y turístico hacia el macizo de Los Gigantes. La obra incluyó la construcción de un nuevo puente sobre el río Salsacate, dejando el anterior metálico, de cien años de antigüedad, como monumento histórico. También se incluyó la reparación de los puentes sobre el Río Jaime y el arroyo Las Chacras. La inversión en esta etapa fue de 18.414 millones de pesos y beneficia de manera directa a Taninga, Las Palmas, Los Talares y zonas rurales del departamento Pocho. “La gente empezará a venir a vivir a esta región porque tendrá trabajo, progreso y desarrollo”, destacó el gobernador.
El gobernador Martín Llaryora inauguró la pavimentación del tramo Tala Cañada–Taninga de la Ruta Provincial 28, una obra estratégica que da origen a un nuevo camino de montaña y acceso alternativo al cordón de Los Gigantes, potenciando la conectividad, el turismo y el desarrollo del noroeste cordobés.
Con una inversión de 18.414 millones de pesos, la Provincia finalizó la pavimentación de 13,2 kilómetros en una traza clave del Valle de Traslasierra, transformando un histórico camino serrano en una ruta segura y transitable durante todo el año.
La Ruta Provincial 28 en Córdoba, conocida como el «Camino a Los Gigantes», es un corredor turístico de 92 kilómetros que conecta el Valle de Punilla (Tanti) con el Valle de Traslasierra (Taninga/Salsacate) pasando por la reserva natural Los Gigantes.
La pavimentación del primer tramo mejora la conectividad y seguridad, creando un nuevo circuito panorámico alternativo a las Altas Cumbres, ideal para trekking y naturaleza. La obra incluyó la construcción de un nuevo puente sobre el río Salsacate, dejando el anterior metálico, de cien años de antigüedad, como monumento histórico. La intervención incluyó además la reparación integral de los puentes sobre el Río Jaime y el arroyo Las Chacras.
“Son las obras de infraestructura las que nos van a transformar, no solo a los departamentos de Pocho y Minas, sino a toda la provincia”, afirmó el mandatario provincial.
Llaryora remarcó que se trata de una decisión política de largo plazo, comparable a grandes hitos viales como el Camino de las Altas Cumbres, que cambiaron definitivamente el perfil productivo y turístico de amplias regiones serranas.
“Esta ruta va a ser un nuevo lugar para todos los cordobeses y los argentinos. Es un nuevo corredor turístico de montaña, que abre oportunidades y pone en valor un paisaje único como Los Gigantes”, subrayó.
En ese sentido, sostuvo que la obra forma parte de una mirada integral de desarrollo que incluye educación, salud, servicios y conectividad, anticipando un crecimiento sostenido de la región. “La gente empezará a venir a vivir a esta región, no se va a querer ir, porque tendrá trabajo, progreso y desarrollo”, expresó.
El impacto en las localidades
La jefa comunal de Tala Cañada, Paola Martínez, destacó que “esta obra es fundamental no solo para la salud y la educación, sino también porque potencia el desarrollo turístico de Traslasierra. Sin la decisión del Gobierno provincial, no hubiera sido posible. Todo el departamento Pocho está profundamente agradecido”.
Por su parte, la intendenta de Salsacate, Karina Figueroa, valoró que “en un contexto nacional difícil, sostener la obra pública es una decisión política que hay que reconocer”.
En tanto, el intendente de San Carlos Minas, Walter Romero, afirmó que “esta obra va a transformar el noroeste cordobés y marca el camino del trabajo conjunto entre municipios y Provincia”.
En el cierre del acto, Llaryora destacó el acompañamiento de la comunidad y aseguró que la pavimentación del nuevo camino de montaña demuestra que “lo que parecía imposible hoy es una realidad”, reafirmando el compromiso del Gobierno provincial con el desarrollo del interior.
Detalles técnicos de la obra
El tramo pavimentado inicia en Taninga, al final de la intersección entre las rutas provinciales 15 y 28, y se extiende de oeste a este hasta la localidad de Tala Cañada, finalizando antes del cruce del arroyo Tala Cañada.
La obra contempló una carpeta asfáltica de 5 centímetros de espesor, una base granular de 18 centímetros y una subbase de 20 centímetros. Además, se reparó el puente metálico sobre el Río Jaime y se realizó el mantenimiento del puente de losa de hormigón armado sobre el arroyo Las Chacras.
