En el encuentro que tuvo lugar en la Universidad Nacional de Córdoba los rectores y rectoras de las universidades nacionales de la provincia junto a dirigentes gremiales solicitaron el acompañamiento de la Ley de Financiamiento Universitario. Estuvieron presentes algunos legisladores de distintos bloques políticos.

Este lunes, en la sede del Consejo Superior de la Universidad Nacional de Córdoba (UNC), se desarrolló un encuentro entre autoridades de universidades públicas cordobesas y legisladores nacionales con el objetivo de impulsar el tratamiento de la Ley de Financiamiento Universitario en la Cámara de Diputados de la Nación.

La convocatoria reunió a rectores de instituciones que integran el Consejo Interuniversitario Nacional (CIN), otras autoridades universitarias, directivos de gremios docentes y nodocentes, y representantes estudiantiles de las federaciones universitarias de Córdoba y Río Cuarto, así como legisladores nacionales por Córdoba.

Entre los legisladores que participaron estuvieron Juan Brügge, Carlos Gutiérrez y Natalia de la Sota (Encuentro Federal), Soledad Carrizo y Gabriela Brouwer de Koning (UCR), Gabriela Estévez y Pablo Carro (Unión por la Patria), y una representante de la senadora Alejandra Vigo (Unidad Federal).

Las autoridades universitarias presentes estuvieron encabezadas por Jhon Boretto (UNC); Mariela Marchisio (vicerrectora UNC); Luis Negretti (rector Universidad Nacional de Villa María); y Marisa Rovera (rectora Universidad Nacional de Río Cuarto); Julia Oliva Cúneo y Daniel Artaza (rectora y vicerrector de la Universidad Provincial de Córdoba, respectivamente); y los decanos de las facultades regionales de la UTN Héctor Macaño (Córdoba) y Alberto Tolosa (San Francisco).

El decano de la UTN-Villa María, Norberto Gaspar Cena, no pudo asistir.

Una ley para garantizar derechos

La actividad se enmarca en el proceso de elaboración del proyecto de Ley de Financiamiento Universitario, que fue presentado por un grupo de rectoras y rectores del CIN ante la Comisión de Educación de la Cámara de Diputados, junto a la FUA y el Frente Sindical de Universidades Nacionales. La propuesta fue elaborada colectivamente en una comisión ad hoc creada tras el plenario del CIN realizado en San Luis en abril de este año.

Durante el encuentro en Córdoba, el rector de la UNC, Jhon Boretto, destacó que las universidades están en una situación crítica. “Necesitamos previsibilidad y un piso de financiamiento que garantice el derecho a la educación superior. Esta ley busca asegurar el funcionamiento de nuestras instituciones y también el futuro de quienes estudian, enseñan e investigan en ellas”.

El proyecto establece un piso básico de recursos para el funcionamiento de las universidades nacionales, contempla la recomposición salarial y define la fuente de financiamiento sin creación de nuevos impuestos ni afectación del equilibrio fiscal. En tal sentido, el rector Boretto señaló que se trata de una reorientación de prioridades en el gasto público que reconoce a la educación superior como estrategia de desarrollo económico y social.En el intercambio, hubo consenso entre representantes universitarios, legisladores y organizaciones gremiales sobre la gravedad de la situación que atraviesa actualmente el sistema universitario argentino. Se destacó la necesidad urgente de garantizar condiciones mínimas de funcionamiento, acceso, permanencia y egreso, en especial para estudiantes de sectores más postergados.

La UNRC presente

«La Universidad Pública es un derecho que nos pertenece a todos», dijo la rectora de la UNRC, Marisa Rovera, quien destacó la importancia de la universidad pública en el encuentro con legisladores nacionales por Córdoba.

«No debemos estar alejados de quienes toman decisiones», afirmó y le pidió a los legisladores nacionales su acompañamiento a la Ley de Financiamiento Universitario, fundamental para garantizar la continuidad y el desarrollo de la educación pública en nuestro país.

Durante la reunión la rectora Marisa Rovera dijo que “ha sido un espacio fructífero y enriquecedor para poner una vez más sobre la mesa el significado del sistema universitario público argentino y del sistema científico argentino, sistemas que son inconcebibles de maneras separadas.

Acá se han explicitado múltiples variables que convergen a la hora de sostener y fortalecer el sistema universitario público argentino en su conjunto, ya que la universidad pública debe pertenecernos a todos no solo a quienes la habitamos sino a cada uno de los argentinos porque es una conquista de todo un país.

Por eso tengo la plena confianza más allá de los avatares que venimos transitando y de las complicaciones que derivan de las crisis profunda en la que nos encontramos va a haber una luz al final del túnel porque eso es lo que merece el pueblo argentino, la universidad le pertenece a cada uno de los argentinos. De tal manera que confiamos en que los legisladores acompañen nuestro reclamo”, destacó Rovera.

En tanto Florencia Granato, secretaria General de la Asociación Gremial Docente-AGD de la UNRC dijo que la situación financiera de las casas de estudios es «fulminante» y que el desfinanciamiento de las universidades nacionales apunta directamente al desarrollo del país.

Granato dijo que es muy difícil la situación laboral y salarial de las universidades nacionales y lo que “estamos viviendo es un ataque a las universidades nacionales que está siendo fulminante, no creemos que haya un vuelta atrás en forma sencilla frente a una gestión que ataca la educación, que es lo mismo que atacar el desarrollo del país, como economista entiendo que si uno tiene una deuda tiene que tener formación para poder producir y saldar esa deuda, es imposible reparar una deuda externa sin salud, sin educación, sin ciencia y tecnología”.

Agregó que se “están menoscabando las bases mismas del crecimiento de este país” y dijo a los legisladores: “Ustedes son nuestros representantes y tienen la voz para decirlo, esto debe ser frenado, nos vamos a quedar con nada de cara al futuro, ustedes tienen esa responsabilidad”.

Por su parte Daniel Garis, secretario General de la Asociación de Trabajadores de la Universidad de Río Cuarto-ATURC dijo a los legisladores nacionales que defiendan los intereses de los trabajadores. “Nosotros, los trabajadores, les dimos el voto de confianza cuando los votamos”, señaló.

Expresó: “Quisiera decirles (a los legisladores) que pasaría en Río Cuarto sin la Universidad, que pasaría con las cámaras comerciales, con los alquileres, con el sistema de transporte, con los clubes, con las empresas que nos venden el gas, el agua, con los impuestos que pagamos, en gran medida Río Cuarto se mueve por la Universidad, claro siempre considerando la parte más importante que es la educación, y a veces es difícil hacerle entender esto a la sociedad.

También quiero decirles que los salarios de los trabajadores están muy bajos, lo cual además repercute en la obra social porque baja el monto de los aportes, lo mismo en la jubilación y quiero decirle que los legisladores son elegidos por los trabajadores por eso entendemos tienen que apoyar la ley de financiamiento universitario”.

El titular de la Federación Universitaria de la UNRC, Valentín Caglieri, hizo referencia a la situación de las becas universitarias, que han tenido un deterioro importante. Caglieri valoró el sistema de becas de la UNRC y dijo que la educación pública es una ventaja competitiva para el país.

Destacó que “las becas estudiantiles son una inversión para futuros profesionales que sin las becas no podrían estudiar ni graduarse. Además de esta cuestión de bienestar en los estudiantes tenemos el problema como está afectando la crisis el sistema salarial de los universitarios, lo que genera migración docente y falta de motivación del personal nodocente”.

Caglieri sostuvo ante los legisladores que “el proyecto de financiamiento universitario no pide algo descabellado sino que plantea incrementos graduales en relación con el PBI y creo que la educación pública es una ventaja competitiva para el país, el sistema universitario por su supuesto es un sistema mejorable, claro que no es perfecto, pero eso no significa que se deba tirar todo por la borda”.