La Feria Internacional de Turismo se realizará del 27 al 30 de septiembre en La Rural, con la participación de más de 40 países y todas las provincias argentinas. Portugal será el país invitado de honor.
El turismo interno atraviesa uno de los momentos más críticos de los últimos años. La combinación de caída del consumo, altos costos y pérdida del poder adquisitivo de las familias argentinas impactó de manera directa en hoteles, agencias de viajes, transportistas y prestadores de servicios turísticos. En ese marco, la Feria Internacional de Turismo de América Latina (FIT 2025) se perfila como el gran escenario para relanzar la oferta nacional y generar expectativas en la antesala de una temporada de verano que se anticipa desafiante.
La edición número 29 de la feria tendrá lugar del 27 al 30 de septiembre en el predio de La Rural, en la Ciudad de Buenos Aires, y contará con la participación de más de 40 países. Portugal será el país invitado de honor y se prevé que presente un despliegue cultural y gastronómico para reforzar los vínculos con el mercado argentino.
La Federación Argentina de Asociaciones de Empresas de Viajes y Turismo (Faevyt), organizadora del encuentro, destacó que la FIT constituye “el punto de encuentro más importante para el sector en la región” y aseguró que, frente al difícil escenario económico, la feria adquiere un rol estratégico. “Es el espacio donde se muestran las propuestas de todas las provincias y donde los prestadores pueden generar nuevos acuerdos comerciales para sostener la actividad en los próximos meses”, señalaron desde la entidad.
Durante las cuatro jornadas, se desarrollarán rondas de negocios, presentaciones de destinos y capacitaciones orientadas a agencias de viajes, operadores turísticos y actores vinculados a la actividad. Al mismo tiempo, el público general tendrá la posibilidad de recorrer los stands y conocer en detalle las propuestas que preparan las provincias y los municipios de todo el país.
La situación del turismo interno obliga a una estrategia que combine promoción, financiamiento y creatividad en la oferta. Según datos recientes de la Cámara Argentina de Turismo, el movimiento turístico durante la temporada baja mostró caídas significativas en los principales corredores, lo que incrementa la necesidad de sostener la demanda a través de eventos masivos como la FIT.
En este sentido, los organizadores remarcaron que la feria no solo funciona como vidriera, sino también como motor de acuerdos concretos que permiten mantener en pie a un sector que emplea a miles de trabajadores. Para las provincias, la presencia en la feria representa una inversión estratégica: es el espacio para reposicionar sus atractivos, acercar nuevas experiencias y llegar directamente al público consumidor.
Con un verano que se anticipa con fuertes condicionamientos en materia de precios y accesibilidad, la FIT 2025 aparece como el último bastión del turismo interno, una oportunidad para renovar el interés de los viajeros argentinos y sostener a una industria que necesita recuperar oxígeno.