Desde la Basílica Nuestra Señora de la Consolata, en Sampacho, se ha lanzado una invitación a las familias del pueblo y de toda la diócesis a la misa de cierre del Año Jubilar.
La misa se celebrará este domingo desde las 20 horas frente a la basílica. “Con esperanza consagramos a cada familia”, sostiene el sacerdote Osvaldo Leone.
En la oportunidad se contará con la imagen de La Consolata que saldrá de la basílica.
La Iglesia Diocesana se prepara para la Clausura del Año Jubilar Ordinario este domingo 28 de diciembre, en la fiesta de la Sagrada Familia de Jesús, María y José.
El Año Santo fue convocado hace un año por el Papa Francisco bajo el lema “Peregrinos de la esperanza” y tendrá su cierre definitivo a nivel universal el 6 de enero de 2026, cuando el Papa León XIV clausure la Puerta Santa de la Basílica de San Pedro, en la solemnidad de la Epifanía del Señor.
La celebración central será la Santa Misa, que se oficiará a las 20 en el altar que se levantará al frente de la Basílica y Santuario de Nuestra Señora de La Consolata y se ha invitado a todos los fieles de la diócesis que deseen peregrinar hasta el templo y que su familia reciba la bendición.
Esta ceremonia marca el cierre de un tiempo especial de gracia para los fieles.
A nivel mundial, durante este Año Jubilar, los fieles pudieron recibir la indulgencia plenaria al peregrinar y atravesar las Puertas Santas habilitadas en distintos puntos de las diócesis.
Un Año Jubilar (o Año Santo) en la Iglesia Católica es un tiempo especial de gracia, perdón y reconciliación que se celebra periódicamente, cada 25 años (jubileo ordinario) o de forma extraordinaria por un motivo especial, para que los fieles renueven su fe, reciban el perdón de las penas por los pecados (indulgencia plenaria) y se reconcilien con Dios, el prójimo y la creación.
Se origina en el jubileo judío del Antiguo Testamento y se caracteriza por ritos como pasar por la Puerta Santa, confesarse y comulgar, simbolizando un nuevo camino de salvación
La Basílica de Sampacho es el Santuario Nuestra Señora de la Consolata, un importante templo del sur de Córdoba, elevado a basílica en junio de 2024, convirtiéndose en la quinta de la provincia y la número 48 en el país, reconocido por su profunda devoción ligada a inmigrantes piamonteses, y un centro clave en el turismo religioso regional, con una gran imagen venerada de la Virgen.
Historia y devoción
La devoción llegó con inmigrantes del Piamonte italiano (Turín) a fines del siglo XIX, fundadores de Sampacho.
Una gran imagen corpórea de la Virgen de la Consolata (1232 kg) fue traída desde Turín en 1908, bendecida en 1908 y declarada patrona en 1915 por decreto papal.
El templo fue declarado santuario en 1946 y Monumento Provincial en 2015 y Nacional en 2020.
El 10 de junio de 2024, el Cardenal Ángel Rossi presidió la ceremonia que la elevó a Basílica Menor, un reconocimiento del Papa.
Importancia
Esto ubica a Sampacho dentro del circuito religioso de Córdoba, junto a otros templos importantes.
A la vez, marca un hito para la comunidad, que celebra su fuerte vínculo con la Virgen, especialmente recordado en el aniversario del terremoto de 1934, del cual el pueblo se sintió protegido por la intercesión de la Consolata.
En resumen: es un santuario con profundo arraigo local que recibió el título papal, destacándose por su fervor y por ser un punto de referencia para peregrinos.
