El IETSE reveló que el 50,4% de los hogares eliminó alguna comida diaria; en el 31% de los hogares, alguien sintió hambre y no pudo saciarlo; en casi el 20% hubo días sin alimentos en el hogar; y un 19% tuvo que pedir comida o dinero para alimentarse.
El Instituto de Estadísticas y Tendencias Sociales y Económicas (IETSE) reveló que en agosto que el 58% de las familias cordobesas no logró cubrir de manera satisfactoria la Canasta Básica Alimentaria (CBA) y que de los hogares que sí lo pudieron hacer, el 72% recurrió para ello a alguna ayuda estatal, como la asignación universal por hijo (AUH), la Tarjeta Alimentar y programas provinciales.
A su vez, reveló el informe del IETSE que el 50,4% de los hogares eliminó alguna comida diaria, generalmente la cena; mientras que en el 31% de los hogares, alguien sintió hambre y no pudo saciarlo; en casi el 20% hubo días sin alimentos en el hogar; y un 19% tuvo que pedir comida o dinero para alimentarse.
El relevamiento de la entidad registró una inflación del 2,2% en agosto, bastante por encima del 1,5% que había medido en julio. Explican desde el IETSE que esta aceleración tiene como factor clave el traslado a precios de la suba del dólar que, «aunque fluctuante, se ubicó muy cerca del techo de la banda de flotación ($1.400-.)».
Precisaron que esta presión cambiaria se trasladó, entre otros, al rubro Alimentos y bebidas sin alcohol (el de mayor ponderación en la medición inflacionaria), que aumentó 2,3% y terminó impactando de manera directa en la inflación general. «El resultado: la inflación, que en Julio parecía amesetarse; durante Agosto volvió a perforar el 2% hacia arriba», indicó el IETSE.
En paralelo, señaló la entidad, el Banco Central de la República Argentina (BCRA) endureció las condiciones de liquidez, a través de la Resolución “A 8302” (18/08/2025), que elevó los encajes bancarios obligatorios. «La intención fue absorber pesos del mercado y frenar presiones cambiarias, pero el efecto colateral fue restringir el crédito al consumo y a las pequeñas empresas. Esto puede explicar el hecho de que el uso de tarjetas de crédito para compra de alimentos haya caído por segundo mes consecutivo en un punto porcentual, forzando a las familias a recurrir al fiado o a préstamos informales», analizaron.
Y concluyeron: «A nivel microeconómico, se observa que las políticas monetarias de estabilización, impactan de lleno en la vida cotidiana, especialmente en los sectores de ingresos bajos y medios».