El presidente Javier Milei anunció este sábado, en el acto central de la 137° Exposición de la Sociedad Rural Argentina (SRA), una reducción en las alícuotas de los derechos de exportación para economías regionales y otros productos agroindustriales. El anuncio fue bien recibido por los principales referentes del sector, aunque desde distintos espacios remarcaron que se trata apenas de un primer paso hacia la eliminación total de las retenciones.

Durante su discurso, Milei calificó a las retenciones como “un flagelo” y aseguró que su gobierno avanzará progresivamente hacia su eliminación definitiva. “Vamos a terminar con este impuesto perverso que castiga al que produce”, afirmó ante un público entusiasta en el predio de Palermo.

Respaldo de la Sociedad Rural

El presidente de la SRA, Nicolás Pino, fue uno de los primeros en respaldar públicamente el anuncio, aunque hizo hincapié en la necesidad de avanzar con decisión: “Los productores necesitamos la certeza de que usted eliminará las retenciones. Son un impuesto distorsivo, discriminatorio y confiscatorio. No se puede producir con un Estado que se queda con una parte del trabajo antes de venderlo”, sostuvo durante su intervención en la apertura oficial de la muestra.

Pino valoró la presencia del presidente y destacó el gesto político, pero insistió en que el campo necesita “señales claras, duraderas y previsibles” para planificar a largo plazo.

La mirada de los gobernadores del interior productivo

Los gobernadores de la Región Centro, principales aliados institucionales en esta agenda, también manifestaron su apoyo al anuncio.

“Celebro y acompaño la decisión del presidente Milei de reducir las retenciones. Es una medida que impacta de manera directa en el desarrollo, la inversión y el empleo en nuestras provincias”, expresó el gobernador de Entre Ríos, Rogelio Frigerio.

Desde Córdoba, Martín Llaryora señaló que la medida responde a un reclamo conjunto que vienen impulsando junto a sus pares de Santa Fe y Entre Ríos. “Es un paso en la dirección correcta. Pero el objetivo debe seguir siendo la eliminación total de las retenciones, que penalizan al interior productivo”, remarcó.

Por su parte, Maximiliano Pullaro, gobernador santafesino, consideró que “el reclamo fue escuchado” y destacó también la necesidad de acompañar esta medida con mejoras en infraestructura y acceso al crédito.

Dirigentes rurales: apoyo y cautela

Desde Confederaciones Rurales Argentinas (CRA), su presidente Carlos Castagnani valoró el anuncio y sostuvo que, aunque es una medida parcial, representa un avance. “Siempre dijimos que no hay razón para que existan retenciones. La baja anunciada es positiva, pero falta un camino claro hacia retenciones cero”, expresó.

En la misma línea, el dirigente de CARBAP, Ignacio Kovarsky, afirmó que el discurso de Milei tuvo un tono alineado con los reclamos históricos del sector, aunque remarcó que es necesario “apurar los tiempos” y transformar los anuncios en hechos concretos.

Desde la Federación Agraria Argentina (FAA), Elvio Guía fue más prudente: “Valoramos la iniciativa, pero hay que tener en cuenta que muchas economías regionales siguen asfixiadas. La baja no debe ser selectiva ni pensada solo para los grandes”.

Una posición más crítica fue la de Omar Príncipe, dirigente de Bases Federadas y ex presidente de la FAA, quien cuestionó que la medida favorece “más a los grandes exportadores que a los pequeños y medianos productores” y advirtió sobre “el riesgo de que se trate de un gesto temporal con fines políticos”.

Una medida con impacto político

El anuncio presidencial se dio en el marco de una Exposición Rural atravesada por un fuerte respaldo político del sector agropecuario al Gobierno nacional. Milei fue ovacionado durante su discurso y recibió gestos de adhesión por parte de los dirigentes y el público presente.

Sin embargo, también quedaron en evidencia algunas tensiones internas: la dirigencia rural exige previsibilidad, estabilidad normativa y una política fiscal coherente con los objetivos de crecimiento y competitividad.

La baja de retenciones fue interpretada como un gesto en esa dirección, pero los referentes del sector advirtieron que el proceso debe acelerarse y sostenerse en el tiempo para consolidar un verdadero cambio estructural.