Por Florencia Guttlein. Comunicadora Social.

En tiempos donde todo se comparte, se publica y se comenta, el marketing digital dejó de ser un accesorio para convertirse en una herramienta clave para cualquier proyecto o emprendimiento. Es fundamental informarse y formarse en la materia. Emprender no es solo ofrecer un buen producto o tener una gran idea; es también saber contarla, transmitirla y conectar con otros desde un mensaje claro, auténtico y coherente.

Las redes sociales, bien utilizadas, son aliadas poderosas. Pero mal gestionadas, pueden jugar en contra. Una cuenta de Instagram desordenada, mensajes confusos o una identidad visual sin coherencia generan ruido y alejan. Hoy mĆ”s que nunca, ā€œno basta con saber mucho, es necesario saber comunicarlo bienā€ porque incluso la mejor propuesta puede pasar desapercibida si no se comunica con estrategia.

Es fundamental tener objetivos claros en el marketing digital, ya no basta con tener una presencia online, sino que es necesario tener una planificación y un enfoque estratégico bien definido para maximizar los resultados.

DetrÔs de cada publicación debería haber una intención, un objetivo. ¿Quieres vender? ¿Inspirar? ¿Enseñar? ¿Construir comunidad? La improvisación permanente no es sostenible. La clave estÔ en crear una comunicación alineada con nuestros valores, con lo que somos y con lo que ofrecemos, entendiendo que cada post, cada historia o cada reel es una pieza del todo.

El marketing digital no es solo para las grandes marcas: es para cualquiera que quiera crecer, profesionalizar su presencia online y dar valor real a lo que hace. Porque comunicar bien tambiƩn es una forma de emprender.

Hoy en dĆ­a, todo es digital y el marketing digital se ha integrado en casi todos los aspectos del negocio, cambiando radicalmente la forma como las empresas se comunican con los clientes y aportan valor.