El presidente fue el orador central del acto para celebrar el Día de la Democracia y los Derechos Humanos. «No se negociará nada que signifique poner en riesgo el crecimiento y el desarrollo social», aseguró respecto a las tratativas con el FMI para refinanciar la deuda que contrajo la gestión de Cambiemos.
El presidente Alberto Fernández aseguró que «la Argentina del ajuste es historia» y resaltó que en las tratativas con el Fondo Monetario Internacional (FMI) para refinanciar la deuda que contrajo la gestión de Cambiemos «no se negociará nada que signifique poner en riesgo el crecimiento y el desarrollo social» del país.
Al encabezar junto a la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner en Plaza de Mayo el festival «Democracia para siempre» para celebrar el Día de la Democracia y los Derechos Humanos, acompañados por los exmandatarios de Brasil, Lula Da Silva, y de Uruguay, José «Pepe» Mujica; Fernández reivindicó el pago de la totalidad de la deuda externa con el FMI en 2005, realizada por el expresidente Néstor Kirchner.
«No somos los que no queremos pagar deuda, tampoco somos los que la tomamos, somos los que tenemos que hacernos cargo de la deuda que nos dejan a nosotros», enfatizó el jefe de Estado.
«Tranquila Cristina, no vamos a negociar nada que ponga en riesgo» el crecimiento o el desarrollo del país; «no tengas miedo», dijo Fernández ante una señal de asentimiento de la vicepresidenta.
El mandatario recordó además que «muchas veces el FMI le soltó la mano a presidentes argentinos y así puso en crisis la institucionalidad de la Argentina».
Luego, mirando a la multitud que ocupaba la Plaza de Mayo, aportó: «Si el FMI me suelta la mano voy a estar tomado de la mano de cada uno de ustedes, de cada argentino y de cada argentina».
«No somos los que no queremos pagar deuda, tampoco somos los que la tomamos, somos los que tenemos que hacernos cargo de la deuda que nos dejan a nosotros»
«Nosotros, como hicieron Néstor (Kirchner) y Cristina, vamos a cumplir con las obligaciones que asumieron otros, no nosotros. Pero el día que esas obligaciones las tomemos nosotros como propias, eso no va a ser a costa de la salud pública, de la educación pública, de los salarios, de las jubilaciones. Porque la Argentina del ajuste es historia, no hay posibilidades que eso ocurra», subrayó el jefe de Estado.
También reseñó: «Hace dos años exactamente estuvimos aquí con Cristina, frente a ustedes, diciéndoles lo que íbamos a hacer en los cuatro años que nos tocaban afrontar, y al día 99 cayó la pandemia, y todo se trastocó, todo se hizo más difícil, toda la agenda» prevista «se alteró».
Sobre la celebración de hoy apuntó que «hace 38 años la Argentina recuperaba la democracia después de la noche más larga que le tocó vivir, la más ingrata de las noches, la de la muerte, la tortura, del exilio, de las desapariciones».
Y en ese sentido, agregó: «La recuperamos un 10 de diciembre de 1983 y desde ese día recordamos esa fecha como los días de la democracia, que son también los días de los derechos humanos, el Día Internacional de los Derechos Humanos».
«Hace 38 años la Argentina recuperaba la democracia después de la noche más larga que le tocó vivir, la más ingrata de las noches, la de la muerte, la tortura, del exilio, de las desapariciones»
El Presidente consideró que «la democracia tiene mucho que ver con los derechos humanos y la Argentina es hoy un símbolo de derechos humanos en todo el mundo».
«Es un símbolo porque ahí están las Madres y las Abuelas que resistieron la dictadura y nos dieron un ejemplo de lucha cuando en la Argentina, mucha, gran parte, no participaba de esa lucha solitaria que esas Madres y esas Abuelas llevaban adelante», ponderó.
Además, Fernández ratificó que el gobierno sigue «haciendo todo lo necesario para que el último culpable se haga cargo de la responsabilidad que le cupo en la noche más negra que Argentina vivió», en alusión a la última dictadura cívico militar.
Destacó que la Argentina «hoy preside el Consejo de Derechos Humanos de la Organización de las Naciones Unidas «y eso es el resultado de que la comunidad internacional ha premiado y reconocido la conducta» del país en esta materia.
Y enumeró que «empezó allá por 1985, cuando juzgaron a lo que eran los jefes del autodenominado Proceso de Reorganización Nacional, asesinos genocidas que se llevaron la vida de decenas de miles de argentinos».
«No olvidemos nada. No olvidemos a los genocidas, y tampoco olvidemos a los que nos endeudaron. Lo hicieron hace apenas dos años atrás y ahora andan dando cátedra de cómo se sale del problema»
«Siguió después cuando con Néstor (Kirchner) presidente, derogamos las leyes de impunidad, de Obediencia Debida, de Punto Final y sentamos los genocidas, a los torturadores en el banquillo de los acusados», prosiguió el mandatario.
Fernández sostuvo que la democracia «es esencialmente libertad, es ser libres y respetar la diversidad, y sostuvo que formulaba estas consideraciones «en un tiempo en el cual las posiciones más extremas han vuelto a aparecer bajo el rótulo de libertarios, de liberales».
«Aparecen los mayores defensores del conservadurismo, aparecen los xenófobos, los negacionistas, y nosotros a eso, ante eso, no podemos quedarnos en silencio, de brazos cruzados. A los negacionistas recordémosle que la Argentina se vivió un terrorismo de Estado que se llevó la vida de miles y miles de argentinos, a los xenófobos, a los discriminadores, digámosle que somos lo que más hacemos por aceptar la diversidad en una Argentina plural», contestó.
Para el mandatario, «en Argentina la democracia, es tener memoria, es no olvidar los que quieren olvidar y quienes invitan» a que eso suceda «son los que quieren sacarse de encima la responsabilidad que han tenido en el tiempo que gobernaron».
Por otra parte, Fernández recordó que que «ningún jubilado paga medicamentos», e hizo hincapié en la sanción de la ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo (IVE) y de los 1.000 Días para acompañar a las mujeres gestantes, y la ampliación de derechos en materia de diversidad y de género.
Además, reafirmó que su Gobierno hará «todo lo necesario para que cada argentino tenga un empleo digno», ratificó que para su gestión «primero están los más postergados» y prometió que el año próximo hará todo lo que esté a su alcance para que «la distribución del ingreso mejore, el salario crezca y las ganancias no queden en el bolsillo de unos pocos».
El presidente convocó a todos los sectores a «construir otra Argentina, una Argentina libre, justa y soberana como siempre hicimos los peronistas», y expresó que su gobierno trabajará para que «la justicia siga siendo justicia, sin encubrir o perseguir».
Fuente: Télam