LA TRASTIENDA

La carrera electoral por la próxima conducción política que tendrá la Universidad Nacional de Río Cuarto, a partir del 5 de mayo, va adquiriendo color en propuestas y densidad en acciones.

La coalición oficialista Nuevo Impulso, que propone a Sergio González y Viviana Macchiarola, hizo una clara demostración de fuerza y capacidad política en los últimos días, con la puesta en escena de un conversatorio abierto en ejes temáticos y posteriores deliberaciones.

Bajo la consigna general de abordar los “Desafíos actuales de la Universidad necesaria”, los promotores de la convocatoria lograron ubicarse en la centralidad de los comentarios políticos en la gran mayoría de los rincones del Campus de la ruta 36, al menos durante la semana que concluyó.

Los ejes seleccionados, fueron los que previamente resultaron de un cuidadoso análisis entre el “hacer” cotidiano de la UNRC, y el “deber-hacer” que vendrá para la próxima etapa. A saber: Conocimiento y Formación; Trabajo y Sector Productivo; Integralidad y Autonomía; Emancipación y Soberanía; Género y Diversidades; Compromiso Social; y Ambiente y Territorio.  

Obsérvese en detalle. Si uno relee cada ítem, bien podrá coincidir con estas líneas, en que cada término, encierra por si solo un concepto, y más aún, una definición. Entonces, todo parece indicar que el binomio González-Macchiarola, y su Nuevo Impulso, no sólo se preparan para conducir los destinos académicos, científicos e institucionales de la UNRC, sino además, para avanzar –si los resultados acompañan- en la construcción de un proyecto político universitario que exceda los límites de la casa de estudios, e interactúe de manera sostenida en los contextos sociales de la región, la provincia y el país. No estaría mal, semejante cometido.

En ese derrotero, figuras con ganado predicamento en sectores de la “Uni”, formularon sus aportes y lanzaron los primeros disparadores. Gisela Vélez, ex decana de Ciencias Humanas; Pedro Ducanto, vicepresidente del Consejo Económico y Social de Río Cuarto; el invitado especial, Germán Cantero, de UNER y UNLu; Jorge De Prada, de Agronomía, con largo recorrido por los aportes de sus equipos en el desarrollo agropecuario regional.

En las butacas del Aula Magna, contigua al Rectorado, también hicieron notar sus presencias y algunos aportes, Julián Durigutti, decano de la facultad de Ingeniería, Carmen Cholaky, decana de Agronomía y Veterinaria, Cristian Santos, vicedecano de Ciencias Humanas, José Tobares, secretario de Economía de la UNRC, Fernando Moyano, secretario de Bienestar Estudiantil, Marco Targhetta, subsecretario de Desarrollo Territorial, entre otros y otras referencias, de todos los clasutros.

También expusieron, Alejandra Giupponi, por Graduados; y Daiana Fontemachi, presidenta del Centro de Estudiantes de Medicina Veterinaria.

Y bien vale enumerarlo en un párrafo aparte, la distinguida presencia de Marcelo Ruíz, ex rector de la UNRC, quien representa a un sector importante de la vida universitaria local, y de cuyo espacio, hasta se especuló con una posible presentación de lista para la contienda en marcha, que luego se diluyó.

González, Macchiarola y equipo, mostraron sus cartas (y sus dientes), en clave política y consistencia organizativa, y marcaron agenda. Ahora será el turno, muy probablemente de las y los integrantes de las otras dos listas en pugna, con Marisa Rovera, decana de Ciencias  Exactas y Nora Bianconi, subsecretaria académica de Ciencias Humanas; y César Casale, docente del departamento de Biología Molecular y Mónica Re, docente de Ciencias Económicas. Seguiremos el prometedor curso de los próximos 40 días de campaña.

La Televisión Digital Abierta y un curioso amparo en Río Cuarto

El Ente Nacional de Comunicaciones (Enacom) llamó a concurso público en 11 provincias –incluida Córdoba, para la adjudicación de licencias de servicios de comunicación audiovisual de televisión digital terrestre abierta en la norma ISDB-T, para personas humanas, personas jurídicas con fines de lucro y personas jurídicas sin fines de lucro regularmente constituidas.

El objeto primordial de los servicios de la Televisión Digital Abierta (TDA) es la promoción de la diversidad, la universalidad en el acceso y la participación, implicando igualdad de oportunidades de todos los habitantes de la Nación para acceder a los beneficios de su prestación.

A casi un año del “apagón analógico”, el 1 de diciembre próximo, fecha en que cesarán las autorizaciones y licencias para todos los operadores de televisión que no hayan digitalizado sus señales, el Gobierno nacional creó un programa para encarar la promoción de la TV digital, que es prácticamente desconocida en la gran mayoría de las localidades del interior del país.

Con la Resolución 1028/22, se creó ahora el Programa Federal para el Fortalecimiento de la Televisión Digital Abierta (TDA), que busca enfatizar en ésta y favorecer la adhesión a ella de más usuarios en todo el país, para lo cual se invertirán $ 691 millones, sobre todo en el desarrollo de infraestructura para internet en villas y asentamientos de varias provincias.

En tanto, se destinarán otros $ 1500 millones para el financiamiento del nuevo programa Instituciones Públicas Digitales, cuyo objetivo es “mejorar o desarrollar” la infraestructura de conectividad de instituciones públicas de carácter provincial dedicadas a la prestación de servicios de salud, administrativos y/o culturales.

Un dato relevante: entre 10% y 15% de los hogares del país utilizan los servicios de la TDA, cuya cobertura alcanza a más de 80% de la población través de 99 estaciones de transmisión.

¿Qué pasa en Río Cuarto?

En Río Cuarto existe una estación de TDA en pleno funcionamiento, cuya antena sobresale visualmente en el oeste de la ciudad, en un predio de la empresa provincial EPEC, a metros de la ruta provincial 30.

No está de más recordar que su habilitación en 2014, sólo fue posible por el esfuerzo  y reclamo de vastos sectores vinculados al desarrollo de una comunicación libre, plural y democrática. El gobierno de Córdoba había vetado su funcionamiento en 2012 y un largo periplo judicial finalmente lo destrabó.

Tiempo después, ya con la grilla de canales acotados pero a disposición de los usuarios, la TDA incorporó las señales del Canal Unirío, de la UNRC, y del Canal 13 de Río Cuarto, que está a cargo de la empresa Imperio Televisión SA.

Curiosamente, por estos días, tras la finalización del cronograma de licitación pública para la adjudicación de licencias en varias provincias, como se dijo más arriba, un recurso de amparo de no innovar presentado por Imperio Televisión, fue dado con curso favorable en el Juzgado Federal de Río Cuarto.

El pasado día 3 del corriente, el ENACOM lo confirmó resolviendo: “…la medida cautelar interina dispuesta por el Juzgado Federal de Río Cuarto, Pcia. de Córdoba, en el marco de las actuaciones caratuladas “IMPERIO TELEVISIÓN C/ ENACOM S/ MEDIDA CAUTELAR -FCB 1344/23-«, a través de la cual se dispuso «(…) 1) Hacer lugar a la cautelar interina hasta que la demandada produzca en el término de cinco días el informe del art. 4 de la Ley 26.854, ordenando a la accionada la suspensión de los efectos de los arts. 7, 8 y 9 de la Resolución del ENACOM 2065/2022 en lo que respecta al llamado a concurso para las localidades de la provincia de Córdoba (…)».

Por si quedan dudas, el llamado a concurso para la licitación de adjudicación de licencias para la Televisión Digital Abierta, en Córdoba, quedó suspendido.

Pero, ¿Qué motivos tuvo Imperio Televisión para presentar el amparo? Más aún, ¿qué intereses se pusieron en jaque con aquel llamado a licitación ahora congelado? También, nos preguntamos, ¿cuánto tiene que ver la acción política y el lobby empresarial al respecto? Nos dicen desde CABA, con tono de voz apenas audible, “tal vez, fijensé por el lado de Sergio Massa y Enrique Nosiglia. ¡Umm! ¿Y Pablo Carro, diputado nacional por Córdoba –del FDT-, presidente de la Comisión de Comunicación en la Cámara Baja? Silencio.

Una vez más, los espacios para una comunicación más horizontal y plenamente abierta, parece que tendrán que esperar.

Llamosas, con un armador en las sombras

El subsecretario de Políticas Sociales de la Municipalidad, Gustavo Dova, se ha convertido en el principal sostén territorial del intendente Juan Manuel Llamosas, en su cruzada para consagrarse candidato a vicegobernador del justicialismo provincial, acompañando a Martín LLaryora en las próximas elecciones de junio.

Dova, de larga relación política y personal con Llamosas, pareció recuperar por estas semanas el overol de operador territorial que otrora se le reconocía. Motivos sobran de un lado y del otro, dicen en el Palacio de Mójica. Para el intendente, siempre sería una garantía descansar en los armados barriales de militantes, referentes y seguidores que en incontables ocasiones hilvanó Dova; y para éste, en esta etapa crucial para el jefe municipal, representa una inestimable oportunidad de reubicarse en un casillero político con otro nivel de reconocimiento.

En lo que va del plan “Llamosas Vicegobernador”, fue el subsecretario quien le tendió los puentes necesarios para que JMLL se encuentre con seguidores y adherentes en no pocos rincones de la ciudad. Convocatorias de hasta 300 personas organizadas por el ex secretario Privado en la primera gestión, han reinstalado al intendente con el combustible que mueve a la dirigencia política: el contacto con la gente.

Por ahora, es el subsecretario de Políticas Sociales quien tiene la exclusividad de la movida territorial del intendente. Y al parecer, estaría cumpliendo con el cometido solicitado en aquella llamada inesperada de fin de año, casi con las copas de brindis en la mano. “Necesito organizar reuniones con la gente, en los barrios, y no dudo que vos lo podés hacer”, habría dicho Llamosas. Del otro lado, respondieron afirmativamente. Pero además, todo indica que hubo conversaciones políticas sobre los tiempos que vienen.

Dova, el subsecretario que -como dicen sus colaboradores inmediatos-, ha logrado conflicto social cero para el gobierno en los últimos tres años, tendría en borrador un proyecto político local post elecciones provinciales. ¿Será?