La secretaria académica, Ana Vogliotti, dijo que, en la primera parte del año, se desarrolló el 90 por ciento de las asignaturas de manera virtual. Otras, por sus actividades prácticas de laboratorio y tareas de campo, podrán finalizar en las próximas semanas. 

En la Universidad Nacional de Río Cuarto, se estableció la continuidad de los procesos de enseñanza y de aprendizaje que permitan la implementación curricular y el cumplimiento de los planes de estudio correspondientes a las carreras de pregrado y grado de manera no presencial durante el segundo semestre de este año; a la vez que se autorizó el desarrollo de actividades presenciales en asignaturas y exámenes finales especiales que, por el carácter de sus contenidos y prácticas, requieren la presencialidad.

Como marco general para el desarrollo del segundo cuatrimestre, se definieron las pautas y estrategias referidas al calendario académico; la implementación curricular de las carreras de pregrado y grado, y las evaluaciones, acreditaciones y condiciones de estudiantes.

La secretaria académica de la UNRC, Ana Vogliotti, sostuvo que “casi el 90 por ciento de las asignaturas se desarrollaron desde la virtualidad durante el primer cuatrimestre” y que “mayoritariamente han podido concluir en ese período”. Dijo que “otras, por sus actividades prácticas -laboratorio, tareas de campo- podrán finalizar en algunas semanas en este segundo cuatrimestre, cuando se autorice la presencialidad y la mayoría podrán iniciarlo o continuar en el caso de las anuales”.

La funcionaria puntualizó que “se han extendido las regularidades que vencían este año y se han flexibilizado las correlatividades de las asignaturas que requieren la aprobación previa de otras para cursar”, con lo cual “los estudiantes hoy pueden inscribirse condicionalmente para cursar las materias que necesiten”.

Por otro lado, Vogliotti señaló que en todas las facultades hay graduados que han podido concluir sus carreras, rindiendo y aprobando las asignaturas de manera on line. Y adelantó que se entregarán de manera personalizada los diplomas a los graduados que ya cumplieron con los trámites ministeriales.

Esta continuidad de los procesos de enseñanza y de aprendizaje fue establecida a través de una resolución rectoral -número 267-  «ad referéndum» del Consejo Superior.

En relación con esta disposición, sobre las actividades académicas del segundo cuatrimestre que está iniciando, la secretaría académica precisó los alcances e implicancias de la resolución.

– ¿Cómo se generó esta resolución?
– En el marco de la “Planificación en contexto de Pandemia y Pospandemia”, coordinado por la Secretaría de Planeamiento; el Consejo Académico de esta Secretaría Académica trabajó intensa y participativamente en la elaboración de un documento que generó la propuesta del acto resolutivo (resolución rectoral número 267), con el propósito de afianzar el derecho a la educación en el contexto actual de aislamiento social. La intención ha sido aportar a un marco institucional para orientar la toma de decisiones académicas en las facultades y en el desarrollo de los planes de estudio a través de los procesos de enseñanza y de aprendizaje, manteniendo el vínculo pedagógico entre profesores y estudiantes en las asignaturas en entornos virtuales. Todo ello, conforme al Régimen de Enseñanza y de Estudiantes vigente, con las adecuaciones que requieren las actuales circunstancias de excepcionalidad debido a las medidas sanitarias y de seguridad frente a la pandemia que estamos atravesando y que ya fueron delimitadas en la resolución rectoral número 202, refrendada por la resolución número 064 del Consejo Superior.

– ¿Qué alcances tiene esta resolución?
– Esta resolución establece la continuidad del desarrollo de las asignaturas en entornos virtuales durante este cuatrimestre, tanto en aquellas anuales como en las que se iniciarán. Un desarrollo que, tal como sostienen los considerandos de la resolución, tiene lugar desde el inicio del primer cuatrimestre, apenas establecido el ASPO -aislamiento social, preventivo y obligatorio- por las autoridades nacionales. Previa autorización y las medidas protocolares vigentes, también habilita para la realización de actividades prácticas y de laboratorio que no pueden ser realizadas de otro modo que no sea presencial.
Si bien es de público conocimiento, es importante reafirmar y enfatizar el reconocimiento del intenso trabajo llevado a cabo desde el principio por las autoridades institucionales, de facultad y gremiales, y de los/as profesores/as y equipos docentes y no docentes. Gracias a este trabajo, condicionado por la enorme complejidad de la situación en sí misma, se pudo convertir de manera imprevista y de un día para otro una propuesta educativa que fue pensada originalmente para la presencialidad a una modalidad virtual y se pudo sostener la implementación de los procesos de formación en casi todas las asignaturas de las carreras desde que se inició el año académico 2020. Teniendo claro que esta es una situación transitoria.

– Un esfuerzo conjunto
– Es titánica la tarea realizada por los docentes en esta conversión; para realizar las adecuaciones en los programas, concretar los encuentros pedagógicos en su desarrollo, diseñar y presentar sus propuestas didácticas, atender a las diferentes demandas de los estudiantes y realizar las correcciones de sus producciones y evaluaciones, devoluciones, consultas… Todo ello, en la mayoría de los casos, aprendiendo simultáneamente la utilización de los dispositivos y herramientas de los entornos virtuales y en algunas circunstancias no disponiendo de los elementos tecnológicos, al menos de manera exclusiva, porque en muchos casos deben ser compartidos con otros integrantes familiares, que también requieren de los mismos instrumentos por la dinámica que ha impuesto la pandemia para las actividades escolares y laborales; todo lo cual implica un enorme esfuerzo y dedicación. Una vez más, los docentes muestran a través de su trabajo responsable y comprometido, su implicancia insustituible en la formación y en la integración del sistema.

En la misma situación se encuentran los estudiantes, que, si bien una considerable población ha podido integrarse sin mayores dificultades, en algunos casos por diversos condicionantes no pueden sostenerse en la modalidad, a veces por dificultades para acceder o para mantenerse en la misma. En ese sentido un aporte ha significado la gratuidad para acceder a través de la telefonía móvil y otros dispositivos, además contamos con EVELIA (Entorno Virtual LIbre Argentino), plataforma propia, que tiene incorporada jitsi, herramienta de software libre que no requiere descarga de ninguna aplicación en la PC y no tiene requerimientos de accesos con cuentas específicas para los usuarios
Por eso, mantenemos nuestro interés para convocar a quienes no han podido integrarse y valoramos especialmente la tarea de docentes y estudiantes que han asegurado la continuidad de los procesos académicos a pesar de los condicionantes y también a los no docentes y profesionales que han contribuido a la mejora de la tecnología institucional necesaria para concretarlos y formalizarlos. De acuerdo con nuestros registros, casi el 90 % de las asignaturas se desarrollaron desde la virtualidad durante el primer cuatrimestre y mayoritariamente han podido concluir en ese período; otras, por sus actividades prácticas (laboratorio, tareas de campo) podrán finalizar en algunas semanas en este segundo cuatrimestre, cuando se autorice la presencialidad y la mayoría podrán iniciarlo o continuar en el caso de las anuales.

– Con esta implementación, ¿se estaría asegurando el cuatrimestre?
– Un cuatrimestre se asegura con la implementación curricular, con el desarrollo de las asignaturas y su cursado por parte de los estudiantes, que no ha cesado nunca desde el comienzo de la pandemia. Los estudiantes pueden cursar, regularizar sus materias y hasta aprobarlas en el caso de las que ofrecen la condición de promoción, con lo cual pueden contar con la acreditación al finalizar el cuatrimestre. Además, es bueno recordar que, en el marco de la resolución rectoral número 202, refrendada por la resolución 064 del Consejo Superior, en las facultades se han extendido las regularidades que vencían este año y se han flexibilizado las correlatividades de las asignaturas que requieren la aprobación previa de otras para cursar; de este modo, los estudiantes hoy pueden inscribirse condicionalmente para cursar las materias que necesiten. Tener en cuenta además que la regularidad tiene una duración de dos años a partir de su obtención; es el tiempo que los/as estudiantes disponen para rendir y aprobar las asignaturas regularizadas.

– ¿Y con respecto a los exámenes finales?
– Bueno, ambas resoluciones mencionadas, refieren a la concreción de los exámenes finales especiales, sobre todo para facilitar la terminalidad de las carreras, para lo cual cada Facultad define los requisitos. Hasta el momento se cuentan con graduados que han podido concluir sus carreras en todas las facultades, rindiendo y aprobando las asignaturas de manera on line.
Y con respecto a la generalización de los exámenes finales para todas las carreras, considerando las condiciones institucionales, tecnológicas y pedagógicas y, sobre todo, las situaciones de los estudiantes y de los docentes, es necesario analizarlo detenidamente y tener en cuenta que, cualquieras sean las decisiones al respecto, son medidas que deben incluir a todos/as. Nuestra Universidad concentra estudiantes de diferentes puntos del país y casi la mitad de su población proviene de la región. Hay que tener claro que, si bien existe incertidumbre con respecto a la finalización de la virtualización generalizada de los procesos académicos y del regreso a la presencialidad, es necesario mantener la expectativa que quizá en un futuro (esperemos no tan lejano) esta situación pueda ser revertida. Llegado el momento, que por ahora no se vislumbra cercano, teniendo en cuenta la existencia reciente de personas con Covid-19 en nuestro contexto local y regional, con todas las medidas de resguardo, seguridad y protección de la salud y por ende, la habilitación por parte de las autoridades nacionales, jurisdiccionales e institucionales, la presencialidad no sólo facilitará el regreso a la modalidad, sino que ayudará a completar cuestiones que quedan pendientes en estas instancias de no presencialidad que, pese a algunas limitaciones y dificultades, en las circunstancias actuales posibilitan la continuidad de los estudios.

– En relación con la graduación, ¿se prevé la entrega de diplomas?
– Considerando el impedimento para la realización de reuniones sociales y en atención a que las colaciones constituyen actos académicos de mucha concentración de personas, estamos trabajando en el Departamento de Diplomas con Ceremonial y Protocolo en la organización para la entrega personalizada de los diplomas, que ya han cumplido con el trámite ministerial, respetando todas las medidas sanitarias y protocolares establecidas por las autoridades. En este sentido, estamos en comunicación permanente con los graduados quienes manifiestan mucha comprensión de la situación y una excelente disposición.

– Una tarea amplia y compleja… ¿se mantuvo siempre?
– Si, como siempre en la Universidad, quizá acentuada por la situación que nos atraviesa como institución, como país, y en el mundo…Pero es bueno reconocer que durante todo este tiempo de pandemia, la institución con el conjunto humano que la constituye y le da sentido ha participado y trabajado incesantemente, desde los diferentes lugares de sus integrantes -académicos, de gestión-política, social, económica, tecnológica, entre otras-, para asegurar los procesos pedagógicos de la formación de grado y posgrado.
En esta dirección tanto las unidades académicas como de las de gestión han redoblado esfuerzos desde el inicio de la pandemia, y trabajado casi sin interrupciones, no sólo en relación con las tareas intrainstitucionales, sino también en relación con lo interinstitucional, con diferentes reparticiones públicas ministeriales, CIN (Consejo Interuniversitario Nacional) y otras.
En esta Secretaría, se mantuvieron la atención permanente de personas, reuniones sistemáticas de trabajo con los integrantes de áreas y con los órganos de asesoramiento, trámites de funcionamiento, las tareas de comunicación académica, orientación vocacional, ingreso para mayores de 25 años, innovaciones pedagógicas y curriculares, biblioteca, edición y publicaciones de libros, diplomas y legalizaciones, seguimiento y registro de planes de estudio y actividades de administración han continuado  (mayoritariamente) on line, sin detenerse. En especial, dada la virtualización académica, las del área de Educación a Distancia y Tecnología Educativa en complemento con las desarrolladas por la Coordinación de Aulas Virtuales Institucionales, que agrupa a cuatro secretarías del área central del Rectorado.
Trabajo cimentado en la convicción de afianzar una formación inclusiva con calidad y la democratización del conocimiento, a la par de reconocer las limitaciones, obstáculos y problemas que nos interpelan a una revisión y a una reflexión crítica permanente, participativa y necesaria, con las diferentes voces, para su mejora en un sentido progresivo. Desafíos que hoy asume la Universidad pública en un contexto tan complejo.

Fuente: DIRECCIÓN DE PRENSA Y DIFUSIÓN – UNIVERSIDAD NACIONAL DE RÍO CUARTO